NOTICIAS DESTACADAS DE LA INDUSTRIA TI
Cada organización que va en crecimiento tiene la necesidad de mejorar su procesamiento y el uso de su información con la ayuda de la tecnología. Por lo mismo, ante cualquier contingencia que se presente, es de vital importancia que la empresa cuente con un plan que permita continuar con la funcionalidad de la organización ante cualquier emergencia. Dicho esto, hoy queremos profundizar en lo que es el DRP en Chile.
¿Qué es y cómo funciona el DRP en Chile?
El DRP (Disaster Recovery Plan, por sus siglas en inglés) o Plan de recuperación de desastres son distintas estrategias y/o acciones para restablecer los servicios TI. Esto es en el caso de que una empresa sufra algún tipo de desastre o contingencia, ya sea natural o no, como:
- robos,
- eliminación accidental de información,
- falla de energía,
- error de programación,
- terremotos,
- inundaciones,
- incendios,
- entre otros.
De esta forma, la empresa es capaz de reanudar sus actividades rápidamente ante cualquiera de estas u otras eventualidades.
Por lo mismo, el objetivo principal de un DRP en Chile, o cualquier otro lugar donde se aplique, es reducir en mayor medida los efectos de un desastre en las funciones de una organización.
Es por eso que es importante contar con un plan de recuperación, ya que esto significaría tener mayor ventaja competitiva. Además, elevaría los niveles de madurez de la empresa al contar con un negocio resiliente y preparado para enfrentar los desafíos del futuro.
¿Por qué contar con un Plan de continuidad de negocios?
Ahora bien, ¿es realmente necesario contar con un DRP en Chile? Pues, considerando que el manejo de datos no es particularmente estable (siempre pueden haber hackeos, pérdida de datos, filtración de los mismos y más), debería ser una política de aseguramiento digital de cualquier empresa que se interese realmente por el bienestar de sus clientes y las personas que confían en ella.
Recordemos que somos parte de un ecosistema digital que no hace más que avanzar. Por lo mismo, la pregunta ya no es si es que ocurrirá un desastre o no. La verdadera pregunta es cuándo.
Dicho esto, las empresas modernas no pueden permitirse perder datos. Independientemente de la causa, la pérdida de datos es costosa y riesgosa a niveles altísimos. Es por ello que algunos de los principales beneficios de contar con un DRP serían:
- continuar con las operaciones del negocio,
- limitar la pérdida de ingresos financieros,
- controlar los costos de la operación,
- conservar una imagen favorable de la empresa,
- reducir los riesgos ante un probable conflicto legal.
Por todo esto, y más, se ha vuelto indispensable contar con un DRP que considere estratégicamente la recuperación de los servicios tecnológicos críticos de la organización. Con ello, se le puede permitir seguir cumpliendo con sus objetivos de negocio. Asimismo, con las exigencias regulatorias, inclusive ante situaciones de desastre que hayan afectado sus plataformas tecnológicas.
En NOUS aseguramos tu empresa frente a cualquier eventualidad
A través de nuestro servicio de continuidad de negocios y Plan de recuperación de desastres, ayudamos a cualquier empresa a estar preparada. Esto lo logramos enfocándonos y preocupándonos de:
- evaluar la capacidad de respuesta frente a eventos,
- contar con el potencial de interrumpir los servicios críticos del negocio que se basan en el uso de tecnologías de la información,
- identificar las fortalezas y debilidades para minimizar los tiempos de respuesta,
- alcanzar los niveles objetivos de operación sin riesgo de pérdida de datos.
Es importante destacar que siempre dependerá de cada organización los pasos a seguir. Por lo mismo, no dudes en contactarnos para evaluar tu caso y resolver dudas.
Desde luego, una organización que implementa el DRP en Chile, tendrá una seguridad reforzada, gracias al uso de herramientas tecnológicas como los servicios en la nube, elementos de prevención, etc. Así que, si aún no cuentas con este servicio para tu organización, aún es tiempo de replantearlo y contar con esta gran ventaja competitiva.